jueves, 25 de octubre de 2007

Hoy al Pabellón de "la paz y la amistad"

Nos volvemos a ver con nuestro 'amigo', el entrenador israelí Pinhas Gershon. Pero más que con el, con quien el Baskonia (o lo que queda de él) tendrá que medir sus fuerzas es contra un coloso griego, el Olympiacos. Los de El Pireo son un rival conocido que después de la temporada pasada en la que quedaron eliminados por nuestros chicos tienen bastantes ganas de resarcirse, y más ante su afición.
Después de la última derrota con el Ricoh Manresa y tal y como está el equipo, tanto física como moralmente, lo más fácil sería que los chicos de Neven Spahija encajaran su primera derrota en esta Euroliga que empieza. Con ocho hombres, uno llegado directamente desde Estados Unidos por ir a visitar a un familiar gravemente enfermo (Will McDonald), otro superando otros problemas familiares (Rakocevic)... es muy difícil superar a un conjunto valorado en 20 millones de euros como el griego. La verdad es que el club de los hermanos Aggelopoulos vuelve a tener un plantel temible que tiene como metas inequívocas acceder a lo más alto en las competiciones domésticas y la Euroliga. Veremos si su nuevo proyecto vuelve a quedar en nada.
Personalmente el equipo de El Pireo me recuerda al Pamesa Valencia a escala europea. Inversiones económicas muy ambiciosas se repiten año tras año para ir terminando en simples proyectos que no cumplen los objetivos. Este año vuelven a tener una oportunidad.
Como refuerzos se pueden contar a un base que arrasó en Italia y no tuvo suerte en la NBA, Lynn Greer, el prometedor base serbio Milos Teodosic, otro ex-NBA Iakovos Tsakalidis... Pero sobre todo, el mejor fichaje de los griegos ha sido la recuperación de un jugador de sobra conocido por los baskonistas; Arvydas Macijauskas. Todos sabemos que si el rubio de Klaipeda tiene el día, es indefendible.
Por suerte la HEBA, nomenclatura de la liga profesional griega, justo acaba de arrancar y los atenienses sólo llevan disputada una jornada en la que ganaron al flojo PAOK Salónica por 76-66. Esperemos que estén de momento poco conjuntados para que los pocos jugadores sanos que nos quedan puedan competir.
Es conveniente recordar el severo correctivo que sufrió el Tau la temporada pasada en unas circunstancias prácticamente idénticas a las de este año. La peor humillación en mucho tiempo hacia los nuestros, con una diferencia de 19 puntos. Sólo Planinic tiró del carro. Después de su buena racha frente al Manresa, espero del croata que haya ganado confianza en su juego y siga en esa línea. Y otro que me daría una grata sorpresa de actuar bien, y se ganaría mi respeto, sería McDonald, en una situación francamente muy difícil. Que venga a disputar este partido es para agradecérselo mucho tiempo y para tenerlo como un auténtico profesional. Veamos cómo se comporta.
Por lo demás, hay que recordar que Gershon es el entrenador que mejor sabe anular la conexión de Prigioni con sus pívots y anular el pick'n'roll que hace a las mil maravillas. Por tanto el timonel argentino y Splitter supongo que tendrán un marcaje muy pegajoso y quienes deberán estar muy activos serán Rakocevic, Mickeal o Teletovic. Y a esperar que los de rojo no tengan un gran día y que la pizarra de Spahija haga magia.
Suerte Baskonia

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